La historia de esta familia y su sidra, se remonta a la época de la posguerra. El abuelo de la actual dueña tenía una sidrería en Madrid, que le acabaron robando debido a la situación crítica que estaba viviendo el país. Al tener tierras en Onís (Asturias) decide abandonar la capital y empezar una nueva vida con su familia en el Norte. Desde el momento que están acomodados en Onís, empiezan a realizar sidra casera además de dedicarse a la ganadería. Los padres de Soraya, siguieron con esta tradición, yendo un paso más allá, y vendiendo dicha bebida por los mercadillos. Pero es la propietaria vigente la que decide crear la marca de sidra Sirviella, con la ayuda de su hijo Alfonso Carriedo González, el cual es una persona muy importante a la hora de elaborarla.
El nombre de Sirviella se corresponde con el nombre de un pueblo del concejo de Onís, donde vive la dueña y está ubicada la sidrería que actualmente regenta Sidrería Restaurante El Pareón.